LA NUEVA ESPAÑA 14/06/2022
La plantilla considera que la empresa “incumple el
convenio”, rechaza el anuncio de despidos y reclama la retirada de la
regulación de empleo
La plantilla de la multinacional Saint-Gobain Cristalería
parará el domingo a las seis de la mañana los tres centros de trabajo que tiene
la sociedad en España: las fábricas de Avilés y de Arbós, en la provincia de
Tarragona, y las oficinas centrales, en la madrileña calle de Príncipe de
Vergara. Levantarán la huelga el día 9 de julio a las seis de la mañana: veinte
días de movilizaciones continuadas.
La jornada de vuelta al tajo es, precisamente, la siguiente
a la que termine la negociación del expediente de regulación de empleo (ERE) de
casi un centenar de personas (42, en Avilés) que promueve la dirección del
departamento de Sekurit (vidrio de automoción) porque, señala, “en la planta de
Avilés, entre 2018 y 2021 la producción se ha contraído un 22,9%, lo que supone
que se producen casi 290.000 piezas menos al año que en 2018. Esta evolución de
la producción implica que existe un evidente exceso de capacidad”. Y añaden
además que los gastos variables de personal “han supuesto una especial amenaza
para la sostenibilidad de la estructura de costes, dado que no solo no se han
reducido entre 2018 y 2021 sino que se han incrementado un 16,2%”; es decir,
que la dirección de la empresa considera que sus trabajadores son caros, tanto
como para poner en peligro, tal cual están las cosas en la industria de la
automoción y sus auxiliares, un negocio que en 2019 había alcanzado ventas por
valor de 200 millones (lo previsto es que este 2022 estén por debajo de los
163, en todo caso, “muy por debajo” de lo que requiere la división para ser
productiva”).
La convocatoria de huelga –la más grave de la historia
reciente en la planta avilesina– se presentó ayer en la fundación que gestiona
el servicio interconfederal de Mediación y Arbitraje y que es la institución
que atiende los conflictos colectivos en empresas con centros de trabajo
ubicadas en varias comunidades autónomas. Los trabajadores de la multinacional
tienen que ir a la huelga porque la empresa “incumple el convenio”, pero
también porque rechazan “la destrucción de empleo” y la posterior “precarización”
del que queda. Por eso reclama a la dirección de la empresa que retire el ERE.
Los trabajadores y la dirección se ven esta semana para negociar dos medidas
“traumáticas” –así las llaman–: la congelación temporal de los contratos de
toda la plantilla de Sekurit durante 12 días (179 personas) y, además, el
despido de 42 de estos a partir del próximo día 8 de julio (que es cuando se
cierra el período de negociación abierto la semana pasada). Además, la parte
social –los sindicatos CC OO, UGT, CSI y CGT (con representación sola en
Arbós)– aguardan a que los árbitros citen a las partes en conflicto “antes de
que acabe la semana” con el fin de evitar la movilización que anuncian los
trabajadores y que, todo hace prever, dejará sin actividad las plantas
completamente.
La situación en que se encuentra la división de vidrio para
automoción de Saint-Gobain Cristalería no es la mejor de las posibles. Y sucede
así porque se ha visto en el ojo del huracán de una tormenta perfecta que
incluye una crisis en la fabricación de semiconductores (elementos clave de los
coches), una caída del consumo de vehículos como consecuencia del devenir
político en Europa (el brexit, Ucrania) y la reorganización del mercado. Los
trabajadores añaden la puesta la deslocalización de la producción avilesina.
El departamento de Glass pide no verse “comprometido”
El departamento de Glass de la empresa Saint-Gobain
Cristalería, en palabras del consejero de Industria, Enrique Fernández, va
bien, mucho mejor que el de vidrio para automoción. Los dos departamentos
operan en el mismo complejo industrial, en La Maruca. La empresa, por eso,
reclamó: “Queremos manifestar nuestra solidaridad y apoyo en este proceso [el
expediente de regulación de empleo en Sekurit para 42 trabajadores avilesinos],
deseando que se alcance un acuerdo en las mejores condiciones posibles para las
personas que se puedan ver afectadas y a la vez garantice la continuidad de la
actividad de Sekurit en ambas plantas. Queremos recordar que este proceso,
ajeno a nuestro negocio, no afecta a la integridad de la plantilla de Glass ni
ARDC, debiendo asegurar todos y todas que el futuro de nuestra actividad no se
vea comprometido en este proceso, debiendo focalizar nuestros esfuerzos en
continuar prestando el mejor servicio a nuestros clientes”. Sucede, sin
embargo, que la convocatoria de huelga de veinte días se aprobó el pasado
viernes en dos asambleas a las que acudieron trabajadores de los dos
departamentos y, además, del departamento de investigación.