El Comercio 28/10/2025
En una conferencia con la plantilla, el director general
señala la necesidad de mejorar la productividad y ajustar los costes laborales
«Cuestiones técnicas y económicas» condicionan en la
actualidad las decisiones de Saint-Gobain sobre la renovación del horno float
de La Maruca y cuya continuidad puede condicionar el futuro de la multinacional
del vidrio en Avilés. Así se desprende de las declaraciones que Jean-Luc Gardaz
mantuvo hace unos días con todos los empleados de la compañía y que ahora se
han desvelado.
En su intervención, el director general de la compañía
expone que el sector económico donde se encuentra es «un negocio interesante»,
asumiendo plenamente su carácter cíclico para el desarrollo de su actividad.
En ese contexto, se aborda la decisión de la inversión para
la construcción del nuevo horno float. El director general confirma que se
trabaja en esa línea con dos condicionantes que frenan cualquier tipo de
anuncio público.
«Uno es un tema técnico y otro de financiación», señala sin
entrar a dar más detalles. No obstante, señala que el objetivo de la dirección
de la multinacional en España es que la decisión final se alineará con los
objetivos de rentabilidad establecidos para Saint-Gobain a nivel mundial. Es
decir, mantenerse en actividades que aseguren una rentabilidad que oscile entre
el 15% y el 18% del EBITDA.
Uno de los retos que conoce la dirección es el carácter
cíclico de la actividad de la construcción y, para romper esa tendencia, su
actividad pasa por «dar más valor añadido y productos de sostenibilidad».
Algunas de esos productos ya se encuentran en su oferta
comercial, pero la dirección de España encuentra otras dificultades en clave
interna y que Jean-Luc Gardaz planteó a la plantilla.
Mensaje a los trabajadores
Así, apuntó que «hay ciertas condiciones de productividad y
de coste laboral que no están dentro de ese cuadro que garantice realmente la
rentabilidad a un cierto nivel»; lo que supone un claro mensaje para la
plantilla en un momento en el que se ha iniciado la negociación de un convenio
de centro donde la dirección argumenta la necesidad de aplicar una moderación
salarial y recortes en determinados conceptos como forma de enviar un mensaje a
la dirección central para reducir reticencias a la inversión.
Gardaz avanzó a que, en el momento en que se cierren las
incertidumbres sobre la financiación del proyecto, la compañía lo comunicará a
sus equipos. Y es que, en otro momento de su diálogo con los trabajadores,
explica que la para la dirección mundial de la compañía «Europa no es la
prioridad del grupo para invertir. No tiene que ser una sorpresa, pero tampoco
tiene que ser una mala noticia. La realidad es que el grupo dará prioridad a
los colocar sus recursos en aquellos lugares donde hay mayores retornos»,
declaró. En esta línea apuntó que la empresa no abordará nuevas compras en
España, centrando su negocio en la innovación, el aumento del valor añadido a
sus productos y la economía circular, campo donde en Avilés ya se han impulsado
proyectos.
Gardaz no descartó que en ese futuro se firmen asociaciones
y colaboraciones con otras empresas del sector, sin entrar más detalles.
En el encuentro también se abordó el futuro de la división
de Mobility, nueva denominación de Sekurit. El alto directivo confirmó el
proceso de segregación en marcha por responder a «diferentes sectores». Recordó
que, en el nuevo plan estratégico, la dirección global avanzó la posibilidad de
cerrar o vender actividades que no ofrezcan la rentabilidad esperada, aunque
eso no suponga que Mobility deba salir del perímetro de Saint-Gobain.
https://www.elcomercio.es/aviles/saint-gobain-condiciona-nuevo-horno-aviles-cuestiones-tecnicas-economicas-20251027063849-nt.html