El Comercio 09/04/2024
Monteserín pide «no tirar la toalla y buscar una solución» y los partidos de la oposición cargan contra la política industrial del PSOE
La decisión de Saint-Gobain no ha cogido por sorpresa a los representantes políticos de la región tras los años de problemas que lleva acarreando y, aunque todos coinciden en lo negativa que es la noticia, su análisis difiere de unos a otros. «Siempre que hay un ERE es una malísima noticia», reconoció el presidente del Principado, Adrián Barbón, que espera que la negociación que se abra entre los sindicatos y la compañía sirva para salvar «cuantos más puestos de trabajo mejor». «Las organizaciones sindicales tienen un trabajo que hacer, que siempre el Gobierno de Asturias apoya», insistió.
Por su parte, la consejera de Transición Ecológica, Industria y Desarrollo Económico, Niveles Roqueñí, calificó el anuncio de «pésima noticia», aunque su departamento aún quiere enterarse «bien» de los detalles y conocer qué alternativas se ofrecen para que el impacto sea «el mínimo posible».
Mientras que la alcaldesa de Avilés, Mariví Monteserín, expresó ayer cierta esperanza. «Quiero pensar que existe una posibilidad de continuar, no hay que tirar la toalla», afirmó. Monteserín apeló a la negociación para buscar una solución que evite los despidos y asegure la continuidad de la actividad. En este sentido, avanzó que reclamará la mediación del Gobierno regional para alcanzar ese posible acuerdo.
El PP, sin embargo, culpó de esta situación a «la falta de una política industrial» que está llevando al sector «al desastre en Asturias, sin exigencia alguna del Principado». Precisamente, el anuncio de la multinacional gala coincidió con la rueda de prensa que ya había convocado la diputada nacional popular Esther Llamazares sobre la situación de las electrointensivas y el voto en contra de PSOE y Sumar en el Congreso de una iniciativa del PP «para evitar el daño casi irreparable que se está provocando». «Es frustrante que sea necesario seguir insistiendo en las mismas cuestiones que hace tres años, cuando las consecuencias en Asturias empiezan a ser más que preocupantes», recalcó, para recordar también «la sombra sobre el futuro de Arcelor». Junto al senador popular Pablo González, se coordinará para plantear acciones en las comisiones de Indutria de las dos cámaras.
Por su parte, Gonzalo Centeno, diputado de Vox en la Junta General, consideró el anuncio «sabido y esperado» tras la evolución de los últimos años. Sin embargo, sí se mostró sorprendido por otras cuestiones, como que se den subvenciones públicas a compañías «independientemente de sus cuentas de resultados» y se preguntó qué ha hecho la consejería desde hace tres años, cuando ya se trasladaron problemas.
Desde Convocatoria por Asturias, además de rechazar el cierre, se insistió en la necesidad del máximo consenso para defender la continuidad de la división. Así, la diputada regional Delia Campomanes planteó «la máxima unidad con sindicatos, también otros agentes sociales y económicos y, cómo no, los partidos políticos. Es una nueva deslocalización que debemos evitar». Asimismo, calificó la medida como «un nuevo mazazo» que «rechazamos de forma frontal»
Además, el secretario general y portavoz parlamentario de Foro Asturias, Adrián Pumares, mandó el apoyo de su formación a la plantilla y, aunque reconoció también que la noticia «desgraciadamente no pilla por sorpresa», porque «ya llueve sobre mojado», reclamó al Gobierno regional «buscar fórmulas que permitan que el impacto de este cierre sea el mínimo posible».
Por otro lado, la diputada del Grupo Mixto Covadonga Tomé calificó de «intolerable que Saint-Gobain anuncie despidos masivos» tras lograr un beneficio de 2.700 millones e insistió en la necesidad de crear «un fondo público de participaciones estratégicas» para tomar parte de la propiedad con el fin de evitar deslocalizaciones y como «única solución viable». Y recordó también que la compañía no ha acometido las inversiones que prometió y que «lleva tiempo formando a los empleados de la planta de Marruecos».