LA NUEVA ESPAÑA 01/07/2022
El líder de UGT acusa a la multinacional de "abusar de la ley" y de despedir para "contratar en peores condiciones" | La empresa ofrece a la plantilla de Arbós incorporarse a un almacén de logística de vidrio
epe Álvarez, que es el secretario confederal del sindicato Unión General de Trabajadores (UGT), señaló ayer directamente a los directivos de la compañía Saint-Gobain Cristalería, una empresa que defiende la necesidad de despedir a 93 trabajadores (42 en Avilés y 51 en la fábrica de Arbós, en la provincia de Tarragona) para recuperar la viabilidad. Dijo a este respecto que estos directivos "abusan de la ley porque quieren pasar este mes de negociaciones, al que están obligados, para luego aplicar el expediente y, después, habrá que acudir a la autoridad judicial. Y entonces será cuando el daño ya esté hecho, cuando la decisión ya sea irreversible y sea imposible poder volver a la situación anterior, aunque se determine que el proceso no se podía realizar". Y añadió a este respecto que la parte de "la reforma laboral que no se derogó la hay que cambiar: todo lo que tiene que ver con los despidos lo tenemos que cambiar".
Por eso, explicó, "la lucha de los trabajadores de Saint-Gobain es la lucha de todos los trabajadores". Añadió, además: "El Estado tiene que garantizar que los expedientes de rescisión de contratos, de cierres de empresas, no se hagan en primera instancia si no llevan el visto bueno de la administración", recalcó.
"Estamos ante una empresa que utiliza prácticas viejas, pasadas de moda: no hay razones para esta reducción de plantilla que quieren hacer los directivos de Saint-Gobain. Les hemos dado alternativas, les hemos puesto encima de la mesa la posibilidad de hacer una reducción de tiempo de trabajo de toda la plantilla porque seguramente los problemas que tiene la empresa son de carácter temporal, pero no quieren", se lamentó ayer a mediodía el secretario confederal del sindicato Unión General de Trabajadores (UGT).
"Hemos propuesto cambiar el ERE por un ERTE, por una reducción de horas, pero la empresa no ha dado una respuesta positiva lo que demuestra la mala fe de este expediente porque no quieren abordar un problema: lo que quieren es despedir", añadió Álvarez, que participó ayer en una asamblea de trabajadores de la multinacional francesa que se celebró en la puerta de acceso a las instalaciones fabriles de La Maruca, donde el pasado día 19 –cuando se inició la huelga para tratar de que la compañía retire el expediente de regulación de empleo– la plantilla afectada instaló el campamento de su piquete informativo.
Precisamente ayer, poco antes de que Álvarez tomara la palabra en la asamblea, los trabajadores en huelga volvieron a tratar de informar a los empleados y cuadros que querían entrar en las instalaciones sobre el motivo del conflicto colectivo. Tras ello, los segundos entraron en las instalaciones, pero los otros se dieron media vuelta y la caravana se disipó.
Pepe Álvarez acusó a la dirección de la compañía –que ayer por la mañana sí mantuvo una reunión de la mesa negociadora de los despidos– de despedir a los 93 trabajadores "para luego contratar a personal en peores condiciones". Esta circunstancia es, para el líder nacional de UGT, inasumible. "Pero no sólo por parte de las organizaciones sindicales, también por parte de la comarca de Avilés, de Asturias entera y y de todo el país".
Saint-Gobain entiende por su lado que "sólo una negociación con el clima social adecuado y la aplicación de los ajustes necesarios consentirán a Saint-Gobain Sekurit seguir compitiendo en el mercado español y atraer la inversión que permita la ejecución de planes industriales". A continuación respondió a la reclamación de la Junta General diciendo que su compromiso con Avilés y Arbós "es firme", pero que necesita de "una transformación como paso inevitable para encarar el futuro con garantías".
Mientras Pepe Álvarez estaba en la puerta de Saint-Gobain, la mesa negociadora del ERE mantenía la quinta reunión en Madrid. De allí se salió con la propuesta de abrir un almacén de logística de vidrio de automoción en Arbós, un nuevo negocio que daría trabajo a una decena de personas (en Arbós la amenaza es de 51 despidos). "El centro logístico dependerá del ERE y de la firma de un acuerdo que satisfaga a todas las partes", aclara la empresa.
No presentaron, sin embargo, ninguna alternativa para Avilés (lo harán, dicen los sindicatos, la semana que viene).
Por otra parte, el consejero de Industria, Enrique Fernández, recordó también ayer que el Principado de Asturias "siempre hace una labor de entendimiento entre las partes que tienen que negociar".