Comunicado ERTE Saint-Gobain Sekurit Avilés 2023 (VII)

   17/05/2023    C S I  Saint-Gobain  I N F O R M A                    https://bit.ly/co170523

EL MARAVILLOSO MUNDO DE LOS ERTES EN SEKURIT

Terminó este martes 16 de mayo el periodo de consultas del ERTE para la actividad de Saint-Gobain Cristalería SEKURIT en Avilés de 45 días sin acuerdo, siendo rechazado al final por todos los sindicatos.

Por parte de CSI, nos ratificamos en que no quedaban acreditadas las causas alegadas por la empresa y la proporcionalidad de las medidas y, por tanto, no puede finalizar el periodo de consultas con acuerdo, ya que éste supondría la presunción de concurrencia de las causas justificativas del ERTE.

La información aportada por la empresa nos parece inespecífica e insuficiente, ya que, entre otras muchas, no se detallan las ventas de unidades por modelo de la fábrica de Avilés y de SEKURIT España, por lo que no se puede verificar que en efecto existe una bajada general de la demanda y que no se están desviando producciones.

Hemos intentado en la negociación que la empresa nos facilitara una serie de datos para poder entender su propuesta, datos que en ningún momento ha facilitado y que demuestran que lo único que pretenden es someter a los trabajadores/as.

La empresa solo ha buscado el acuerdo condicionando a la parte social con ofrecimientos económicos y amenazas si no se asumían las condiciones, sin garantías de ningún tipo, sin la justificación debida y sin aceptar ninguna otra alternativa, demostrando la mala fe mantenida durante la negociación.

También es incomprensible que, cuatro meses después de presupuestar una producción de parabrisas para este año 2023, se redujera ésta significativamente en un 30%. Máxime teniendo en cuenta que la mitad de la producción avilesina, en este momento, está dedicada al mercado de recambios, por lo que las posibles disminuciones de fabricaciones para modelos nuevos solo deberían tener una afectación parcial. Esto, de ser ciertos los datos aportados por la empresa, ya que desconocemos si los modelos que reducen su producción son los que fabrican en Avilés.

Tampoco existe un compromiso empresarial para mantener el empleo ni un plan industrial que garantice la actividad a medio plazo.

Esta sección sindical, considera que la empresa fue creando a lo largo del año una situación para provocar un ERTE y seguir aprovechándose de fondos públicos en una compañía con beneficios millonarios. Desconocemos la auténtica razón que nos lleva a esta situación, pero durante la última década la empresa fue reduciendo la capacidad productiva de la planta con la excusa de adecuarla a la actividad para posteriormente reducir ésta, llevando a SEKURIT Avilés a una situación que compromete gravemente su futuro.

Reiteramos que la situación del centro de Avilés de falta de carga de trabajo no es por culpa exclusivamente del mercado, como nos quieren hacer entender. La decisión de asignar o repartir las distintas producciones o modelos, depende exclusivamente de la propia compañía Saint-Gobain. Quiere esto decir que, por razones que desconocemos, unos centros tienen más asegurado el futuro que otros, cuando esta multinacional, en una estrategia de competencia interna, decide apostar por la viabilidad de unas plantas en detrimento de otras. Ese es el verdadero problema. A la planta de Avilés ya la descendieron a tercera categoría, la de recambios, y ya solo nos dedicamos a estar de pedigüeños de trabajo con las sobras de otros.

Tal parece que la dirección esconde la realidad de lo que finalmente pretende, lo que no sería buena señal, o que ni siquiera sabe cómo llevarlo a cabo y andan totalmente perdidos, lo que sería aún peor. La sensación que nos queda es la de estar en un barco a la deriva con un timonel que no sabe ni interpretar las cartas de navegación.

En definitiva, la luz roja de alerta y peligro sigue encendida todavía con más intensidad. Así no se puede seguir, con EREs, ERTEs y despidos, si no se quiere acabar en un proceso de descomposición general. 

 Cuando no te gusta lo que ves, cerrar los ojos es la peor solución