Saint-Gobain incluye Avilés en su plan para fabricar vidrios con baja huella de carbono

 La Nueva España   16/08/2022

La compañía ha hecho ensayos exitosos en la fábrica francesa de Arniche y asegura estar trabajando para extender la tecnología a España

La descarbonización de la industria, un tema del que esta pasada semana se habló largo y tendido en los cursos de verano de La Granda, figura entre los objetivos prioritarios de Saint-Gobain, una multinacional presente en la comarca con su fábrica de La Maruca. La compañía manifiesta "estar trabajando para reducir la huella de carbono" de sus productos planos en España –lo cual es tanto como decir en Avilés, que es donde tiene concentrada su principal actividad–, "lo que permitirá ofrecer en los próximos meses nuevas soluciones, tanto para viviendas como para el mercado no residencial".

Este camino se le ha despejado a Saint-Gobain a raíz del avance tecnológico que ha supuesto la fabricación en su fábrica de Arniche (Francia), durante el pasado mes de mayo, de una tirada de vidrio plano con una calidad óptima y obtenido con mayores criterios de sostenibilidad.

En concreto, el equipo industrial de Arniche, junto con el de I+D, realizó ajustes técnicos en el horno que, junto a otras innovaciones incorporadas de orden energético y que la empresa no ha detallado, permitieron lograr una correcta calidad óptica del vidrio fabricado en la prueba piloto.

El proyecto llevado a cabo en Francia maximiza la circularidad del vidrio al haberse usado en el proceso productivo una mayor cantidad de vidrio reciclado y triturado (calcín) que la habitual.

Esto tiene dos ventajas desde el punto de vista ambiental: favorece la reutilización del vidrio (un material reciclable por excelencia) –o visto de otra manera, reduce el consumo de materia prima virgen (arena de sílice)– y ahorra energía, pues la exigencia calórica del horno es menor cuanto más aumenta la cantidad de calcín.

"Una producción de vidrio neutra en carbono representa un hito tecnológico y es reflejo del firme compromiso del grupo Saint-Gobain con el planeta, y consecuentemente con el objetivo de alcanzar la neutralidad en carbono para el año 2050", expone la compañía en un comunicado.

Así mismo, detalla que "los nuevos productos se fabricarán a partir de un vidrio con una huella de carbono estimada en 7 kilos de dióxido de carbono por metro cuadrado (para vidrios base de 4 milímetros)".

La intención que manifiesta Saint-Gobain es integrar a partir de ahora los productos con huella de carbono reducida en su porfolio de productos para fachadas, "comenzando por la gama de vidrios con capa de control solar Cool-Lite Xtreme, y todo ello sin comprometer sus prestaciones técnicas ni poner en riesgo su estética".

La referencia al producto Cool-Lite Xtreme remite directamente a la factoría de Avilés, que fabrica este producto desde hace una década. Se trata de un vidrio para construcción que, al margen de la tecnología empleada en el proceso productivo, reduce las emisiones de carbono de forma pasiva al convertirse en un aliado de la eficiencia energética de los edificios que reviste.

Esto lo logra por sus altas prestaciones en términos de luminosidad, que se combinan con el control solar y un alto aislamiento térmico.

Saint-Gobain estima que la nueva serie de vidrios Cool-Lite Xtreme fabricados con tecnología baja en emisiones de carbono "reducirá alrededor de un 40 por ciento la huella global de carbono y se convertirá en el producto más sostenible del mercado en comparación con el estándar de los productos vidrieros de Europa".

Para acreditar todos estos avances en materia de impacto medioambiental, Saint-Gobain anuncia que documentará sus logros a través de la verificación de un tercero (declaración ambiental de producto), un trámite actualmente en desarrollo "y previsiblemente disponible a comienzos de 2023".

Fuentes sindicales de la fábrica de Avilés consultadas por este diario negaron tener conocimiento de cambios inminentes en el proceso productivo relacionados con la huella de carbono, si bien en el ámbito de la empresa dejaron entrever que "pronto habrá noticias", dando a entender además que afectarán al departamento de vidrio plano.

Tres socios galos, comprometidos con el nuevo producto

La iniciativa de Saint-Gobain de fabricar vidrio con baja huella de carbono es un primer paso para fabricar una extensa gama de productos con idéntico objetivo. La iniciativa pionera ya cuenta con el favor de tres de los socios franceses de la multinacional en el mercado inmobiliario. Bouygues Immobilier, Icade Santé y Nexity se han comprometido a utilizar en sus proyectos el nuevo vidrio de Saint-Gobain.

El primero de ellos lo hará en su edificio Kalifornia en Hauts de Seine. Icade Santé lo empleará en el Polyclinique du Parc, operado por el grupo Elsan en Caen, Calvados mientras que Nexity lo utilizará en su proyecto de rehabilitación de Carré Invalides, en París. Los tres se consideran ambiciosos proyectos desde el punto de vista medioambiental y son una muestra temprana del entusiasmo del mercado por comenzar a fabricar sin huella de carbono.

El grupo Saint-Gobain facturó el año pasado 44.200 millones de euros. Suma, en la actualidad, 166.000 empleados, y su compromiso es avanzar hacia la neutralidad de carbono para 2050.

Su actividad de vidrio para el sector de la construcción cuenta con un centro industrial y un centro de I+D en Avilés, con un horno float e instalaciones para dar salida a un producto con capa de aislamiento térmico reforzado, de control solar y para interiores, así como para la fabricación de espejos y de vidrios de seguridad laminados. Todos ellos se emplean tanto en la rehabilitación de edificios públicos como en la renovación de construcciones privadas gracias a sus altas prestaciones, a las que suman ahora el compromiso de sostenibilidad.