El Comercio 27/10/2022
Dirección y sindicatos abordan un plan de bajas voluntarias que podría suponer hasta 25 salidas de trabajadores de la fábrica de Avilés
La dirección de Saint-Gobain Sekurit informó ayer al comité de empresa de la supresión del cuarto turno en Sekurit en lo que resta de año ante la caída de demanda en el sector, incluyendo diferentes regulaciones temporales en las fábricas de auto. La decisión se transmitió ayer a los representantes sindicales en el marco de la negociación del convenio colectivo y el plan de igualdad que se celebran en Madrid. La reducción de un turno también altera el calendario de trabajo.
La situación entre las partes no está exenta de tensión después del anuncio de una regulación de empleo en Sekurit y la huelga de la fábrica de Avilés que terminó con la retirada de la propuesta. Ahora, la empresa ha avanzado un proyecto de salidas voluntarias de la fábrica de Avilés y que planteaba hasta veinticinco salidas de la fábrica.
La cifra no se encuentra cerrada. Las bajas se registrarían tanto en Sekurit como en Glass, lo que, en algunos casos, permitiría cubrir los puestos con traslados internos con lo que se seguiría adelgazando la plantilla de la división de auto con el objetivo de conseguir que salga de las pérdidas en las que se encuentra.
Negociación en marcha
La propuesta no termina de convencer al comité de empresa, más aún cuando llega después de la propuesta del despido colectivo y sin que se avancen las inversiones que la dirección anunció el pasado verano durante el conflicto. Aún no existe un acuerdo y no se encuentran sobre la mesa las condiciones de las salidas, además de los cambios internos.
En suma, son unas negociaciones complejas, en un clima de desconfianza entre las partes y donde la dirección insiste en la necesidad de acometer cambios, especialmente en la línea de Sekurit si se quiere mantener la producción.
Este año, la producción final se centrará por debajo del millón de parabrisas, lo que resulta dramático para los resultados de Sekurit que, por segundo año consecutivo puede cerrar el balance con pérdidas millonarias, lo que no resulta un panorama muy halagüeño para la dirección mundial de la compañía.