El Comercio 12/09/2023
En la vista social en la que se iba a dirimir su nulidad, los sindicatos retiraron la demanda, lo que propició un acuerdo
Sindicatos y empresa llegaron ayer a un acuerdo en el conflicto colectivo en Saint-Gobain Sekurit después de que la parte social hubiera planteado la nulidad del Expediente de Regulación de Empleo Temporal (ERTE). El entendimiento se alcanzó después de que la parte social retirara la alegación de mala fe durante la negociación y el periodo de consultas y desistiera de la demanda frente al ERTE. La empresa, por su parte, dejó sin efecto los 30 días que todavía faltaba por aplicar del mismo. El acuerdo se certificó en el Juzgado de los Social Nº 2, en el que estaba prevista la celebración de la vista.
El ERTE se llevó a cabo durante cinco días en junio y otros cinco en julio por la falta de demanda en el sector del automóvil y las paradas que estimaban en la cadena de producción a lo largo del año por los problemas que en el primer semestre del año aún existían en la producción de microprocesadores.
La fábrica pretendía así, según argumentaba, que la producción no se acumulase, reduciendo de esta forma tensiones logísticas y económicas.
Los sindicatos se opusieron desde el primer momento a este expediente y decidieron frenarlo planteando una demanda de nulidad en el Juzgado de lo Social alegando, entre otras causas, mala fe durante la negociación y el periodo de consultas.
La cuestión es que ayer se llegó al juicio con un contexto muy diferente dado que Saint-Gobain Sekurit ya había trasladado que tras la firma de un nuevo contrato ya no necesitaba seguir adelante con el ERTE. La situación cambió en los primeros días de julio cuando el director general de Sekurit, José Antonio Piqueras, se desplazó hasta Avilés para transmitir a los mandos que la carga de trabajo recibida para los nuevos modelos de coches de las marcas Suzuki y Skoda haría innecesario utilizar más días del ERTE. Así las cosas, el acuerdo parecía la resolución más lógica al conflicto.
Sin embargo no fue del gusto de todos los demandantes, los sindicatos UGT, Comisiones Obreras y CSI. Este último cree que este acuerdo «lejos de resolver nada, solo sirve para tapar todos los embustes que venimos sufriendo en esta actividad por sus directivos y trasladar temporalmente el problema donde, a buen seguro, seguirán intentando aplicar medidas restrictivas en un futuro inmediato contra su plantilla».
La Corriente Sindical de Izquierda señala que «llevamos demasiado tiempo apreciando indolencia ante la abusiva política de hechos consumados por parte de la empresa con nula respuesta».
El resto de sindicatos considera que era de sentido común retirar la demanda dadas las circunstancias y manifestaron su «tranquilidad» a expensas de que la compañía siga garantizando carga de trabajo y realice las inversiones necesarias para el futuro de la compañía.
En el recuerdo aún está el expediente de extinción de empleo en 2022 implicaba la salida de un centenar de personas de la división de Sekurit en los dos centros de Avilés y Arbós, dentro de sus proyectos para reorganizarse y recuperar beneficios.