EL COMERCIO 07/07/2022
El comité intercentros se mantiene firme en la petición de retirar los despidos y ve en el plan industrial el punto de partida para negociar
La huelga en Saint-Gobain Sekurit se prolongará hasta el próximo día 30 de julio después de que la mediación entre las partes no alcanzase ayer un acuerdo en el Servicio Interfederal de Mediación y Arbitraje (SIMA). Tras la mañana de conversaciones, no hubo ningún movimiento ni por la dirección ni por los sindicatos, con lo que a partir de este viernes la actividad en la fábrica de La Maruca seguirá parada.
Ya por la tarde, dirección y el comité intercentros (integrado por los sindicatos Comisiones Obreras, SOMA-FITAG-UGT, Corriente Sindical de Izquierdas y CNT) se volvieron a sentar para abordar el expediente de regulación de empleo (ERE). La jornada del miércoles volvió a ser una tarde de escasos avances y todo apunta a un esprint en los dos últimos días para lograr un acuerdo antes de la medianoche del viernes.
Dirección y sindicatos se mantienen firmes en su posiciones, sin que nadie ceda un ápice, aunque sobre la mesa empiezan a aparecer elementos que pueden invitar a un ligero optimismo.
El comité propone diferentes alternativas a la destrucción de empleo, como la creación de nuevos equipos
El más importante es el plan industrial presentado por la empresa, con catorce millones de euros de inversiones, doce de ellos en Avilés, y que, permite reducir los 93 despidos que se barajan a 83 por la previsión de los diez puestos de trabajo en el nuevo centro logístico para el sur de Europa en Arbós y que aminora la salida traumática de personal en la planta catalana.
Para los sindicatos, el documento presentado es «un buen punto de partida» para abordar la reorganización de Sekurit, aunque reclaman más información que, de momento, no llega. Además, el comité intercentros considera irrenunciable mantener todo el empleo o que no haya salidas traumáticas de Sekurit.
La primera vía es la de las prejubilaciones, donde la empresa ya se ha movido planteando la salida de todos los mayores de sesenta años con un 70% del salario bruto y un convenio especial de tres años con la Seguridad Social.
En este campo, existe la posibilidad de que se sume Glass Avilés, que a finales de la semana pasada se incorporó a las negociaciones aunque no debe afrontar ninguna reorganización en su actividad.
Los directivos de Glass aseguran que no tienen vacantes, si bien podrían incorporarse a las prejubilaciones, aunque, para ello, plantean la necesidad de suavizar la huelga en la que se encuentran desde el pasado día 19 de julio y que castiga a un negocio que, este año, llevaba una buena marcha.
Menos traumático
Ahí aparece un primer escollo ya que los sindicatos no ceden ni un ápice y mantienen la convocatoria de huelga. Según exponen en la mesa de las negociaciones, la única vía para levantar la huelga es que se retire el ERE y seguir negociando sin la amenaza de despidos. Por esta razón, reprochan a los directivos de Glass falta de interés, lo que tampoco contribuye a mejorar el clima del diálogo.
Otra vía es la posibilidad del traslado dentro del grupo Saint-Gobain, donde la dirección ha planteado la existencia de 33 vacantes en la categoría de operarios, el grupo profesional más castigado por la reorganización.
Los traslados superiores a los cien kilómetros recibirán una compensación de 20.000 euros. Además, si el salario del nuevo puesto de trabajo es inferior al que ocupaba en Avilés, el sueldo de origen se mantendrá durante dos años. La posibilidad no despierta muchos recelos. Aunque los sindicatos consideran que Saint-Gobain debería hacer un mayor esfuerzo y existen más opciones para recolocaciones en el grupo.
Además, en los últimos días el comité de empresa viene lanzando diferentes ideas para reducir el impacto en la destrucción de empleo. Ayer, los sindicatos lamentaban la «cerrazón» de la dirección a valorar sus propuestas, reprochándole que sólo quiere que se firme su propuesta de despido colectivo.
Entre las ideas que han trascendido está incorporar más medidas de flexibilidad, creación de equipos de apoyo o la reducción de la jornada.
Las propuestas están ahí y se podrían abordar en la negociación, que se encuentra pendiente, del convenio colectivo, donde la dirección también quiere introducir importantes cambios para asegurar la competitividad.
En el desarrollo del último convenio, la dirección ya lanzó un aviso a navegantes ante la negativa del comité de empresa a su propuesta de no aplicar la inflación del año pasado cuando ésta empezaba a dispararse
Ahora, se vuelve a repetir la situación, si bien la inflación se encuentra mucho más disparada, por lo que las tensiones serán mayores. En todo caso, son negociaciones más propias del convenio colectivo, que se encuentra pendiente de iniciar, que de la reorganización de Sekurit.
Sin embargo, son temas que se encuentran pendientes y que podrían entrar a última hora en la mesa de negociación como un camino para que ambas partes alcancen su objetivo: para los sindicatos evitar las salidas traumáticas y para la dirección aplicar una reorganización que permita que Saint-Gobain Sekurit España regrese a los beneficios después de dos años de pérdidas, por primera vez en su historia.
El piquete sigue bloqueando el acceso a la fábrica
La gigantesca pancarta con el lema 'Aquí no sobra nadie' ya forma parte del paisaje de la entrada a la fábrica de Saint-Gobain en La Maruca, donde siguen formándose caravanas con el acceso del personal de oficinas, el único colectivo que no secunda la huelga que comenzó el pasado 19 de junio. Ayer, los trabajadores quemaron neumáticos a primera hora de la mañana. Tan sólo se respeta el acceso al personal de servicios mínimos y a los camiones con las materias primas necesarias para el funcionamiento del horno float de Glass.